La desorganizada natación mexicana pone las esperanzas del futuro, pensando en los Mundiales de 2017 y los Olímpicos de 2020, en dos entrenadores catalanes. Jordi Murio en el caso de la natación, y Anna Tarrés en la natación sincronizada.Jordi Murio, entrenador superior de natación,ha participado en la formación de dos medallistas olímpicos de España. La nueva apuesta de la Federación Mexicana de Natación (FMN), en lugar del alemán Dirk Lange, ya recibió, en papel, detalles de la realidad tricolor.
Eso le permite tener sus primeras impresiones, aunque admite que debe conocer en campo el material que existe.
“Están cerca de Estados Unidos, han tenido influencia de ellos, de entrenadores cubanos, ahora alemanes, han picoteado de todos sitios y no han logrado una consolidación”, estimó Murio. “Lo primero es ver qué puede aportar cada entrenador, y yo ayudarles a que aprendan.”
La FMN dice que es el candidato adecuado porque está dispuesto a mudar su residencia a México, porque habla la misma lengua y porque tiene contactos en Europa que abrirían las puertas para campamentos y fogueo.
En el caso de la natación sincronizada, la FMN ha anunciado que está a punto de firmar un contrato con la polémica entrenadora catalana Anna Tarrés para que ayude a la selección nacional de sincronizada.
"Es una entrenadora de alto nivel y nos ayudará a hacer un diagnóstico en una colaboración con viajes a México por dos semanas cada dos meses. Estamos al final de la negociación", dijo el presidente de la Federación, Kiril Todorov.Tarrés, que llevó a España a la élite en la natación sincronizada, dejó el cargo de seleccionadora española en septiembre pasado, después de que sus pupilas lograran dos medallas olímpicas en Londres (plata en dúo y bronce por equipos), porque la Real Federación Española de Natación decidió no renovarle el contrato.
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