Reportatge del diari La Crónica de Hoy "Los paisajes y naturalezas muertas de Navarro Vives en el Museo del Chopo"
Composiciones Atmosféricas, del pintor catalán Josep Navarro Vives, es una revisión de su trabajo en los últimos tres lustros, donde el color se plasma en paisajes y naturalezas muertas, además de una serie de piezas en donde la luz y la sombra se utilizan de manera extrema.
“México me ha tirado toda la vida. Es un país que me hizo descubrir el color, que es una de las cosas que más me impresionó. Ver a la gente de colonias nativas portando distintas tonalidades me impresionaba. Por eso intenté captar esos colores. Me tardé casi 2 o 3 años para llevarlo a la práctica en algunos de mis cuadros, que después tuvieron gran relevancia en París”, dice el artista plástico.
A este mundo de colores, precisa, lo involucró el arquitecto Luis Barragán, pues considera que él copió ese folklore de la gente nativa. “Cuando conocí Pátzcuaro, Morelia, Oaxaca…, fue algo que se me fue quedando hasta que explotó. Ahora, que he expuesto esta serie en Italia, España y otros países, el mayor impacto fue en EU, donde captaron inmediatamente que no podía ser otro sitio más que México”.
Precisa el catalán que la muestra, conformada por 54 obras, representa distintas atmósferas de su vida, “es mi evolución como pintor, no como artista”. Comenta que por muchos años trabajó el constructivismo, pero hoy su interés es que haya un protagonista, que la gente entienda el arte. “No quiero hacer lo que me impone la moda, siempre he puesto mi criterio… Si yo me hubiera vendido en algún momento de mi vida, pues posiblemente tuviera otra visión y, sin embargo, tengo el respeto de mucha gente”, agrega.
Sobre por qué exponer en el Museo del Chopo, dijo que cuando conoció su remodelación se enamoró y más aún: al mirar que decenas de niños y jóvenes – mediante programas escolares y por sí mismos– visitan el lugar, “con esa alegría”, fue más que suficiente para decidir exponer su obra realizada en los tres último lustros.
“Artísticamente me interesa exponer en el museo porque es otro mundo…, no tiene nada que ver con las salas de exposiciones que son compra-venta. Éste es un reto a la vida, aquí no hay ventas, simplemente aportas tus conocimientos, tu forma de ver la vida, lo que representan los cuadros para ti y esto es lindo, porque no intento captar, sino que la gente disfrute viendo mis cuadros”, dice.
El escritor Sealtiel Alatriste expresa que es imposible abstraerse al mundo emocional que despiertan los trazos abrumados y los objetos envueltos en sueño de Navarro Vives. “Es un artista que gusta de la observación, de encontrar la belleza insólita de lo cotidiano; también de comunicar ese estado personal ante la vida, producto de su madurez como artista y como hombre”, explica.
“México me ha tirado toda la vida. Es un país que me hizo descubrir el color, que es una de las cosas que más me impresionó. Ver a la gente de colonias nativas portando distintas tonalidades me impresionaba. Por eso intenté captar esos colores. Me tardé casi 2 o 3 años para llevarlo a la práctica en algunos de mis cuadros, que después tuvieron gran relevancia en París”, dice el artista plástico.
A este mundo de colores, precisa, lo involucró el arquitecto Luis Barragán, pues considera que él copió ese folklore de la gente nativa. “Cuando conocí Pátzcuaro, Morelia, Oaxaca…, fue algo que se me fue quedando hasta que explotó. Ahora, que he expuesto esta serie en Italia, España y otros países, el mayor impacto fue en EU, donde captaron inmediatamente que no podía ser otro sitio más que México”.
Precisa el catalán que la muestra, conformada por 54 obras, representa distintas atmósferas de su vida, “es mi evolución como pintor, no como artista”. Comenta que por muchos años trabajó el constructivismo, pero hoy su interés es que haya un protagonista, que la gente entienda el arte. “No quiero hacer lo que me impone la moda, siempre he puesto mi criterio… Si yo me hubiera vendido en algún momento de mi vida, pues posiblemente tuviera otra visión y, sin embargo, tengo el respeto de mucha gente”, agrega.
Sobre por qué exponer en el Museo del Chopo, dijo que cuando conoció su remodelación se enamoró y más aún: al mirar que decenas de niños y jóvenes – mediante programas escolares y por sí mismos– visitan el lugar, “con esa alegría”, fue más que suficiente para decidir exponer su obra realizada en los tres último lustros.
“Artísticamente me interesa exponer en el museo porque es otro mundo…, no tiene nada que ver con las salas de exposiciones que son compra-venta. Éste es un reto a la vida, aquí no hay ventas, simplemente aportas tus conocimientos, tu forma de ver la vida, lo que representan los cuadros para ti y esto es lindo, porque no intento captar, sino que la gente disfrute viendo mis cuadros”, dice.
El escritor Sealtiel Alatriste expresa que es imposible abstraerse al mundo emocional que despiertan los trazos abrumados y los objetos envueltos en sueño de Navarro Vives. “Es un artista que gusta de la observación, de encontrar la belleza insólita de lo cotidiano; también de comunicar ese estado personal ante la vida, producto de su madurez como artista y como hombre”, explica.
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