A todos ellos, y antes que nada, muchas gracias por hacerlo posible.
Es en un encuentro de tantas personas, colectivos, empresas, e instituciones como este, donde puede establecerse un marco relacional constructivo que nos permita avanzar como comunidad, como pueblo, como país, y que también permita tender puentes de diálogo necesario con la comunidad que nos acoge, en este caso la ciudad de Barcelona, y por extensión su área metropolitana y Catalunya en general.
Es en un encuentro de tantas personas, colectivos, empresas, e instituciones como este, donde puede establecerse un marco relacional constructivo que nos permita avanzar como comunidad, como pueblo, como país, y que también permita tender puentes de diálogo necesario con la comunidad que nos acoge, en este caso la ciudad de Barcelona, y por extensión su área metropolitana y Catalunya en general.
Sin embargo, - y son voces no muy lejanas las que se encargan de recordarlo -, no podemos hacer la vista gorda a los problemas que tiene nuestra sociedad. Ni la mexicana, ni la de acogida. Puesto que son nuestras raíces y abuelos, y son también nuestro entorno y nuestros hijos. Y muchos se empecinan en decir que "no hay nada que celebrar", teniendo en cuenta la situación cronificada que vive México en cuanto a desigualdades, permanencia de la corrupción política y económica, pobreza y violencia, entre otros.
Los últimos años asistimos a un cúmulo de movimientos internacionales con ánimos de cambiar la situación. Pasa en Catalunya, desde una perspectiva muy concreta, con movimientos que buscan el cambio de su relación con España. Pasa en España, con movimientos políticos y sociales surgidos desde las bases. Pasa en Escocia. Pasa en Egipto. Pasa en Venezuela. Pasa en tantos países varios, y también pasa en México, donde movimientos sociales muy diversos han invadido el panorama mediático y político en pro de las mejoras sociales.
México sigue así la tradición iniciada en 1810, repetida en 1910, y continuada este 2010, de empezar movimientos sociales de cambio cada 100 años. En esta ocasión, avivados por las posibilidades de conexión interpersonal que nos ofrecen las nuevas tecnologías.
Estamos, pues, en unos momentos de cambio, de revolución. En una nueva Primavera. Y venimos celebrando el Grito estos últimos años, en el marco de esta Primavera, que no sabemos hasta donde nos llevará.
MEXCAT cree en las instituciones públicas como garantes de una sociedad justa. Por eso trabaja con ellas, y por ello cree que éstas también deben mejorar. Y por eso también pone la Casa Mèxic Barcelona, nuestro local, a disposición de los ciudadanos y ciudadanas mexicanas que quieran expresarse y trabajar para esta mejora social, siempre desde la cultura, desde la integración a la sociedad de acogida o desde el apoyo comunitario. Las sociedades propondrán, y los gobiernos deberán, tarde o temprano, respetar y acatar la propuesta del pueblo.
Nosotros, con el respeto que nos merece saber que todos los movimientos, colectivos, entidades y personas, - igual que hacemos nosotros -, trabajamos para la mejora de México, reivindicamos nuestro derecho también a querer celebrar el Día de nuestra independencia nacional. El Día que nos permite poner en común nuestros anhelos, y nos permite compartir nuestra tradición, nuestra gastronomía, nuestra cultura, nuestros símbolos patrios, nuestra lengua, nuestro albur, nuestra ilusión, nuestras fiestas, nuestros bailes, nuestro sentido de pertenencia a un mismo pueblo.
Les invitamos a no dejar que este sentido de compañerismo social, de anhelo de mejora, de trabajo para México, se limite sólo a un día o un fin de semana festivo al año. Les invitamos a visitar MEXCAT y Casa Mèxic, a colaborar en nuestras actividades, a proponer eventos, proyectos y programas de atención a sus conciudadanos. Les invitamos a construir México desde Barcelona.
Muchas gracias.
Visca Catalunya, y Viva México.
MEXCAT cree en las instituciones públicas como garantes de una sociedad justa. Por eso trabaja con ellas, y por ello cree que éstas también deben mejorar. Y por eso también pone la Casa Mèxic Barcelona, nuestro local, a disposición de los ciudadanos y ciudadanas mexicanas que quieran expresarse y trabajar para esta mejora social, siempre desde la cultura, desde la integración a la sociedad de acogida o desde el apoyo comunitario. Las sociedades propondrán, y los gobiernos deberán, tarde o temprano, respetar y acatar la propuesta del pueblo.
Nosotros, con el respeto que nos merece saber que todos los movimientos, colectivos, entidades y personas, - igual que hacemos nosotros -, trabajamos para la mejora de México, reivindicamos nuestro derecho también a querer celebrar el Día de nuestra independencia nacional. El Día que nos permite poner en común nuestros anhelos, y nos permite compartir nuestra tradición, nuestra gastronomía, nuestra cultura, nuestros símbolos patrios, nuestra lengua, nuestro albur, nuestra ilusión, nuestras fiestas, nuestros bailes, nuestro sentido de pertenencia a un mismo pueblo.
Les invitamos a no dejar que este sentido de compañerismo social, de anhelo de mejora, de trabajo para México, se limite sólo a un día o un fin de semana festivo al año. Les invitamos a visitar MEXCAT y Casa Mèxic, a colaborar en nuestras actividades, a proponer eventos, proyectos y programas de atención a sus conciudadanos. Les invitamos a construir México desde Barcelona.
Muchas gracias.
Visca Catalunya, y Viva México.
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